miércoles, 2 de diciembre de 2009

Ese hombre es su última esperanza


Normalmente cuando pensamos en cine de terror, pensamos en un filme oscuro, que en cualquier momento nos puede aterrorizar con algo que pueda resultar hasta grotesco.

Por eso El Exorcista, una película que dice mucho más de lo que las películas de terror dicen normalmente (me refiero a las que estamos acostumbrados a ver). Primeramente, genera el concepto de que el tema de la película nos puede pasar a todos, entrando en una casa cualquiera de la ciudad. En una crítica mencionan que es “una casa tan vulgar como cualquier otra”, siendo que no es una tan vulgar… probablemente el autor haya querido decir que era cualquier casa.

Después, está la Iglesia, que en la cinta se para detrás de los hechos y nos habla durante todo el transcurso de éstos. Está presente siempre, diciéndonos que pase lo que pase, ella tiene algo que decir. Pero igualmente intenta mantener cierta distancia de los hechos, pese a todo lo que podría decir (como cuando se menciona que se necesitan pruebas de la posesión). Esta dualidad está representada en la figura del padre Karras. Un hombre que tiene ciertas dudas respecto de lo que cree, pero que en el fondo, se siente atado a la religión.

La pequeña Regan es una figura angelical al principio, pero luego se vuelve insolente y grosera: aparentemente ha sido poseída por el diablo, transformándola en un ser horripilante, irreverente, agresivo y desesperado. Supongo que el último término no es uno muy usado en las críticas para referirse a la satánica figura, pero en el fondo, ésta se notaba deseosa de permanecer ahí, y mostraba desesperación por el que trataran de expulsarla.

Y la iglesia, representada en los sacerdotes que hacían el exorcismo, se muestra seria, impávida frente al enemigo, pero sólo para ocultar su miedo, y demostrarle a él que no los vencería. Finalmente cuando es expulsado, y el padre Karras cae por la escalera quedando gravemente herido, otro padre se le acerca y le hace una especie de extrmaunción rápida, demostrando que ella estaría con él siempre, después de todo lo que haya sucedido.

Interesante resultan las escenas semi-inconclusas, como cuando Regan baja la escalera escupiendo sangre, o en general sus arrebatos, donde nos dejan a la imaginación lo que sucedió después, demostrando que mientras no vemos a la niña, algo le está sucediendo. Hay que olvidarse que a nuestro alrededor sucede sólo lo que percibimos.


Director: William Friedkin
Duración: 122 min.
Música: Mike Oldfield (la original que había sido compuesta corresponde a Steve Boeddeker
Slogan: Something beyond comprehension is happening to a little girl on this street, in this house. A man has been called for as a last resort to try and save her. That man is The Exorcist. (Algo más allá de nuestra comprensión le está sucediendo a una pequeña niña en esta calle, en esta casa. Un hombre ha sido llamado como último recurso para salvarla. Ese hombre es El Exorcista).

jueves, 12 de noviembre de 2009

Un taxista en la ciudad que jamás duerme


La ciudad es un tópico del cine bastante citado a lo largo de la historia. Pero cuando la ciudad es una donde no existe el concepto de dormir, y además, desde la mirada de un taxista que nunca sabe a quien tendrá que llevar a su destino.

Taxi driver es la historia de Travis, un ex marine del ejército que no dormía (como la ciudad) y que deseaba trabajar de noche. Entra al negocio de taxista, un trabajo que le permite echar un vistazo a una ciudad sombría, oculta y a la vez exhibicionista. Y para alguien frío, solitario, con una vida incompleta emocionalmente, hace que nazca en él un deseo de eliminar aquello que considera “basuras de la sociedad”. Lo que le propone al candidato presidencial más seguro para el triunfo cuando se sube a su taxi.

En el marco de ese deseo de eliminar la escoria, se involucra en una historia que le da la oportunidad de eliminar algo de esa basura. Conoce a una prostituta de 12 años, que era engañada por un hombre mayor que ella para que siguiera en ese negocio. Después se entera de que ella ha escapado de casa, en una noche que imitó contratar sus servicios, cuando lo que deseaba era hablar con ella.

Después vemos a un protagonista armado hasta los dientes, transformado en un vengador. Se vuelve frío, deseoso de destruir escorias. En ese estado, va donde el hombre que mantiene engañada a la pequeña y le dispara, desatándose una matanza que termina por asesinar a todos quienes participan de este negocio. Travis termina gravemente herido, pero satisfecho, porque para él, esa niña representaba aquello que era oprimido por ese poder que ejercía la basura de la sociedad.

Al final, travis termina tal como empezó: en el taxi, llevando a quien sabe quien, pero con una carta de infinito agradecimiento de parte de los padres de la niña por haberla salvado. Finalmente se le ve recorriendo la ciudad con una cara de más satisfacción (aunque casi idéntica que en el resto del filme): ya eliminó lo que para él, terminó representando lo que mas anhelaba eliminar.

viernes, 6 de noviembre de 2009

un ratón que soñaba con ser chef...

Una de las películas que mas me ha gustado es precisamente la historia de este soñador que contra toda corriente, luchó por cumplir su sueño.

Rattaouille (Pixar) es la historia de un amable e idealista ratón llamado Rèmy, quien sueña con ser chef. Esto le resulta casi imposible por el hecho de ser quien es, según el mismo dice (es quien relata la película).

Pese a ser una película dirigida a un público infantil, es una historia tan increíblemente compleja como emocionante. En ella, cada elemento, cada personaje representa una parte del camino para cumplir un sueño.


Primero tenemos al protagonista, Rèmy. Él nos representa a nosotros mismos: seres que muchas veces deben luchar contra todo orden establecido para poder cumplir un sueño de toda la vida: ser un cocinero. Pero no está solo, él sabe que no puede llegar lejos siendo roedor. Se le presenta un dilema, que menciona en una parte del filme en una de las discusiones que tiene con su padre por su manera de ver la vida:"yo no puedo renunciar a dos partes de mi". El padre de Rèmy, un ratón fiel a las normas, es aquello que nos recuerda constantemente lo que somos, y lo que nos podría costar llegar a la meta.

"Quiero dejar algo en el mundo" dice él, a lo que su padre responde "Estás hablando como un humano".

Ya fuera del clan, está el humano (curiosamente) que lo salvó y que pretende realizar su sueño con Rèmy, y viceversa: Alfredo Lingüini. Un personaje cuya historia es algo misteriosa y con algunos secretos que resultan claves para entender el desarrollo de la historia. Este atolondrado y torpe personaje será aquello que nos mueve a cumplir el desafío que tenemos, porque para él también seremos su ayuda para su sueño. Un intercambio de ayuda.

Tenemos otro personaje que a mi gusto es casi uno de los villanos mas nobles y malvados se Pixar: Anton Ego. Es el temible crítico culinario que se encarga de destruir y pisotear a cualquier restaurant de Paris. "Condené a Gusteau's a los turistas en mi última crítica" nos dice en una de sus sombrías apariciones. Ego representa a aquello que nos frena y que lucha contra nosotros para que no podamos llegar: sean personas, sean limitantes, sean obstáculos. Durante la película, la lucha de Lingüini, ayudado por Rèmy para gustar al crítico termina siendo uno de los conflictos centrales de la historia.
Rodeando la historia, tenemos otro personaje que también representa esos pequeños detalles que siempre están: Collette, colega y mas adelante algo mas de Lingüini que es la ayuda que nunca pensamos que estaría, pero que aunque en un momento se valla indignada, siempre vuelve para ayudarnos a levantar.

Una historia que transcurre en una París contemporánea, disfrazada con un toque clásico (con la torre Eiffel desde donde se mire porsupuesto), sumado al extraordinario trabajo musical de Michael Giacchino dan como resultado una película extraordinaria que vale la pena ver.